El Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia cumple ahora 57 años siendo parte de todos nosotros, de la Bizkaia expansiva que tuvo lugar en la década de los 70 por el gran desarrollo industrial , demográfico y social; de la Bizkaia sombría azotada después por dramáticas crisis económicas que llegaron a generar tasas de desempleo jamás conocidas; de la Bizkaia que se superpuso y focalizó su resurgir en la renovación urbanística, en la modernización de sus administraciones; de la Bizkaia que afrontó el cambio de milenio, la que ha visto nacer a las generaciones digitales y la que se prepara para adoptar soluciones ante los grandes retos del planeta, ambientales, climáticos y energéticos principalmente.
El Consorcio, no ha sido un testigo más de la gran transformación de este territorio. Ha contribuido a generar por ejemplo en el último año, 321,4 millones de euros de producción en actividades económicas (el 0,23 % de Euskadi) y 1.600 puestos de trabajo en empleos absolutos.
Y así va a continuar.
El programa de inversiones 2023-2026 aprobado en la última asamblea general está dotado de 321,9 millones de euros. 200 actuaciones en todo el territorio (57% de ellas son de abastecimiento y 43% de saneamiento), de las cuales 82 se encuentran en ejecución y 57 se adjudicarán o licitarán en el presente ejercicio.
La mayoría de las actuaciones supondrán una inversión de entre 200.000 y 1 millón de euros de presupuesto, destacando, además, seis grandes infraestructuras que requerirán una inversión superior a 10 millones y cinco por encima de los 20 millones de euros.
Esta entidad va a seguir demostrando con rigor y transparencia ante las administraciones que la gobiernan, pero, sobre todo, ante la sociedad bizkaina, la gran capacidad transformadora que tiene y la anticipación que está incorporando a sus planes estratégicos en previsión de nuevos cambios sociales, económicos o climáticos.
Pero el Consorcio es todavía más porque se acompaña de empresas locales, Universidades, centros de investigación, asociaciones comarcales, entidades de inclusión social para seguir fortaleciendo este territorio y desarrollando sus planes.
El Consorcio participa en el fomento del talento acercando y creando redes de colaboración a jóvenes universitarios; avanza sólidamente en el campo de la investigación desarrollando soluciones y plantas piloto que aceleren escenarios futuros; apuesta firmemente por la innovación, la tecnificación y digitalización de sus procesos e instalaciones a fin de favorecer la mayor eficiencia de las mismas y formaliza alianzas interinstitucionales locales, estatales e internacionales para compartir buenas prácticas y experiencias que ayuden a mejorar el bienestar de las personas.
Dedicarnos a asegurar agua en cantidad y calidad, así como el tratamiento de las aguas residuales son procesos que nos permiten disfrutar cada día de la mejor agua en nuestros grifos, poder refrescarnos, asearnos, cocinar…. en definitiva, tener el bienestar que hemos alcanzado en nuestro Territorio gracias a la gestión y colaboración que en estos años toda una sociedad impulsada por sus Administraciones y empresas ha hecho posible.
Impulso sí, pero apoyado en una alta tecnificación, conocimiento, gran cantidad de recursos económicos y energéticos, un programa plurianual de inversiones y una gran capacidad de adaptación al cambio ante posibles circunstancias sobrevenidas que pudieran aparecer.
Todo para que los 97 municipios consorciados y más de un millón cien mil habitantes abastecidos participen del proyecto del ciclo integral del agua en términos de sostenibilidad, eficiencia, neutralidad climática y cero residuos que hagan de Bizkaia, nuestro Territorio, el mejor entorno antes los nuevos retos ambientales.
Como gestores públicos, somos conscientes del necesario, pero no siempre sencillo equilibrio entre gobierno, sociedad y sostenibilidad para lograr un desarrollo económico, social e institucional estable, viable y coherente con los recursos disponibles: normativa, la digitalización, el cambio climático y la energía.
Considero que el sector del agua, de norte a sur y de este a oeste, está altamente cualificado, y preparado, pero la gobernanza del agua llega a un punto de inflexión en el que la actualización de normativas, los avances tecnológicos, los desafíos climáticos y la necesidad de mejorar la eficiencia energética convergen para redefinir el futuro de la gestión del ciclo integral del agua.
Y todo ello, en un contexto en el que los impactos del cambio climático son cada vez más notables y el sector del agua es uno de los más afectados. La gestión de un recurso vital como el hídrico se convierte en un desafío en un contexto de escasez, pero también en periodos de lluvias extremas, donde el drenaje urbano es clave para mitigar los efectos.
Kepa Odriozola
Presidente del Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia